Diferencia entre cactus y suculentas

 A muchas personas nos encantan estas plantas, pero cuando se trata de diferenciar bien entre ellas, ya no resulta tan sencillo. Aunque todos asociamos rápidamente un cactus con las típicas plantas de desierto cubiertas de espinas de diferentes formas, cuando hablamos de las suculentas no todo el mundo tiene tan claro qué es y qué no es una suculenta. 

¿Son lo mismo que los cactus? ¿Son las espinas lo que los diferencia?

 ¿Y por qué hay entonces cactus sin espinas?

Si quieres aclarar todas tus dudas al respecto y acabar con las falsas creencias que hay extendidas en esta materia, acompáñanos en este artículo de EcologíaVerde en el que hacemos un viaje alrededor de las características y diferencias entre los cactus y las suculentas, así como la plantas crasas.

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Qué son las plantas suculentas

Para empezar, lo mejor es dejar claro las definiciones de las plantas de las que estamos hablando.

El primer turno es para las plantas suculentas: ¿qué es una planta suculenta?

Pues ni más ni menos que toda aquella que es capaz de almacenar agua en sus distintos órganos, ya sean tallos, raíces u hojas, o varios de ellos, así como de reducir la transpiración que sufre.

Como ya habrás imaginado, estos son mecanismos de supervivencia o adaptaciones de las plantas para sobrevivir en entornos extremadamente calurosos y que sufren de sequías regularmente, que les permiten almacenar agua y humedad cuando esta está disponible, y conservarla durante el máximo tiempo posible. Cualquier planta con estas capacidades de almacenamiento de agua y reducción de la transpiración, sin importar su familia o dónde almacene el agua en concreto, es considerada una planta suculenta. Entre ellas se encuentran más de 60 familias botánicas.

Aquí puede conocer algunos de los Tipos de plantas suculentas.

Qué son los cactus

Los cactus, como podemos ver fácilmente por la descripción de antes, son plantas suculentas: almacenan agua en sus tallos, a veces únicos y en otras ocasiones en forma de varias columnas.

Las cactáceas, o cactus, provienen siempre de entornos áridos o desérticos, donde el agua escasea, y por ello son de las plantas con una mayor capacidad de almacenamiento de agua. Tienen que recoger todo el agua posible en las escasas ocasiones en que hay.

Los cactus cuentan con más de 15 géneros y 73 especies. La mayoría de cactus, además, ha convertido sus hojas en las características espinas. Estas cumplen una función doble, pues además de evitar o dificultar que los animales se las coman, son capaces de capturar las menudas gotas de rocío que se forman con las primeras luces del día, dando así lugar a unas especies asombrosamente adaptadas.

Eso sí, hay que tener en cuenta que, aunque asociamos los cactus a plantas espinosas, no todas las especies las tienen, y existen cactus sin espinas que puedes tener en tu hogar  sin ningún miedo por tus mascotas o niños pequeños. 

En estos otro post puedes descubrir los Tipos de cactus: nombres y cuidado

https://www.ecologiaverde.com/diferencia-entre-cactus-y-suculentas-3925.html